En Australia no dejan de quedarse sorprendidos día tras día con la aparición de nuevos peces raros en sus aguas. El último tenía un aspecto muy parecido al de un besugo, pero con dos bocas.
Garry Warrick fue el pescador que lo capturó. Este hombre en sus treinta años pescando se ha encontrado con una gran cantidad de peces con malformaciones, pero nunca se topó con un pez con dos cabezas.
Según Garry, las bocas del pez estaban realmente unidas entre sí. Decidió congelarlo.
Alumnos de 6ºB